Una OPA amistosa (Oferta Pública de Adquisición amistosa) es un proceso mediante el cual una empresa o inversor ofrece públicamente comprar un número relevante o la totalidad de las acciones de otra compañía, contando con el respaldo y acuerdo del consejo de administración de la sociedad objetivo.

En este tipo de operaciones, la dirección y los principales órganos de gobierno de la empresa adquirida consideran que la propuesta beneficia a los accionistas y, en muchos casos, a otros grupos de interés como empleados, clientes o proveedores.


Características principales

  • Consentimiento de la empresa objetivo: el consejo de administración y, a menudo, la alta dirección están alineados con la operación.
  • Negociación previa: antes de lanzar la oferta, existe una fase de conversaciones y due diligence (revisión legal y financiera) para fijar las condiciones.
  • Comunicación conjunta: la empresa oferente y la objetivo suelen emitir comunicados conjuntos para explicar el acuerdo al mercado.
  • Precio acordado: se pacta un precio por acción que normalmente incluye una prima sobre la cotización actual, incentivando a los accionistas a aceptar la oferta.

Ventajas frente a una OPA hostil

  • Menor conflicto: al existir acuerdo, se evita la resistencia activa de la dirección de la empresa objetivo.
  • Proceso más ágil: se reducen las trabas legales y regulatorias, ya que las partes colaboran.
  • Mayor seguridad para el inversor: las auditorías y el acceso a información confidencial permiten valorar mejor la operación.
  • Impacto positivo en la imagen corporativa: la percepción en el mercado suele ser más favorable que en un enfrentamiento directo.

Ejemplo de funcionamiento

Supongamos que la empresa A desea expandirse y ve una oportunidad estratégica en adquirir la empresa B. Tras varias reuniones, ambas partes acuerdan que el precio por acción será de 15 €, lo que representa una prima del 20 % respecto al precio actual en bolsa. La empresa B comunica públicamente su apoyo a la operación, recomendando a sus accionistas que acepten la oferta.


Aspectos legales y regulatorios

En España, las OPAs están reguladas por la Ley del Mercado de Valores y supervisadas por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Una OPA amistosa debe cumplir con:

  • Presentación de un folleto informativo con las condiciones de la oferta.
  • Garantías financieras para demostrar que el oferente puede pagar la adquisición.
  • Respeto a los derechos de todos los accionistas, evitando discriminaciones.

Riesgos y consideraciones

Aunque sea amistosa, este tipo de OPA implica ciertos riesgos:

  • Integración cultural y organizativa: las fusiones posteriores pueden presentar desafíos de adaptación.
  • Sobrevaloración: si el precio pagado es demasiado alto, puede afectar negativamente a la rentabilidad futura.
  • Dependencia de aprobaciones externas: en sectores estratégicos, la operación puede requerir visto bueno de autoridades de competencia o del gobierno.

Una OPA amistosa es, en esencia, un acuerdo estratégico en el que ambas partes cooperan para llevar a cabo una adquisición que consideran beneficiosa. Su éxito depende de la alineación de intereses, la transparencia en el proceso y la correcta ejecución de la integración posterior.