La Tasa Interna de Rentabilidad (TIR) es un indicador financiero que mide la rentabilidad relativa de una inversión, expresada en forma de porcentaje anual. Se define como el tipo de interés o tasa de descuento que iguala el valor actual de los flujos de caja futuros esperados de una inversión con el valor inicial de dicha inversión.
En otras palabras, la TIR es el rendimiento medio anual que genera una inversión si se mantienen los flujos previstos y se conserva hasta su vencimiento. Es ampliamente utilizada en evaluación de proyectos de inversión, valoración de activos financieros, y decisiones empresariales.
Fórmula de la TIR
La TIR es la tasa “r” que satisface la siguiente ecuación:
📌 0 = ∑ [ Ft / (1 + r)^t ] – C₀
Donde:
- Ft = flujo de caja en el periodo t
- C₀ = inversión inicial (negativa)
- r = TIR
- t = número de periodo
Al no tener una solución directa (salvo en casos sencillos), se calcula mediante métodos iterativos o algoritmos numéricos, como los que usan las hojas de cálculo (Excel: =TIR(...)
o =IRR(...)
).
Interpretación de la TIR
La TIR se interpreta como la rentabilidad esperada de la inversión. Para tomar decisiones de inversión, se compara con una tasa mínima exigida de rentabilidad (coste de capital o tasa de corte):
✔️ Si TIR > tasa exigida, la inversión es rentable.
✔️ Si TIR = tasa exigida, la inversión es indiferente.
✔️ Si TIR < tasa exigida, la inversión no es rentable.
También puede compararse con la TIR de otros proyectos para elegir el más atractivo.
Ejemplo práctico
Una empresa invierte 10.000 € en un proyecto que genera los siguientes flujos de caja:
- Año 1: 3.000 €
- Año 2: 3.000 €
- Año 3: 3.000 €
- Año 4: 3.000 €
- Año 5: 3.000 €
La TIR será aquella tasa de descuento que hace que el valor actual de esos 15.000 € iguale los 10.000 € iniciales. En este caso, la TIR sería de aproximadamente 18,9% anual.
Ventajas de la TIR
✅ Tiene interpretación financiera clara como tipo de interés.
✅ Permite comparar diferentes proyectos de inversión.
✅ No necesita fijar una tasa de descuento a priori (a diferencia del VAN).
✅ Es muy utilizada por analistas financieros, empresas y fondos de inversión.
Limitaciones de la TIR
❌ Puede tener múltiples soluciones si los flujos de caja cambian de signo varias veces.
❌ No refleja el valor absoluto creado (como sí lo hace el VAN).
❌ Puede inducir a error si se compara entre proyectos con distintas duraciones o escalas.
❌ Asume que los flujos intermedios se reinvierten a la misma TIR, lo cual no siempre es realista.
Por estas razones, suele recomendarse usar la TIR en conjunto con otros indicadores, como el Valor Actual Neto (VAN) o el Plazo de recuperación (Payback).
TIR en bonos y productos financieros
En el ámbito de los bonos y otros productos de renta fija, la TIR es también conocida como yield to maturity (YTM) o rentabilidad hasta vencimiento, y refleja el rendimiento total que obtendría un inversor si mantiene el título hasta su vencimiento, teniendo en cuenta:
- El precio pagado por el bono.
- Los cupones que recibirá.
- El valor nominal que recuperará.
En este contexto, la TIR es fundamental para comparar bonos con diferentes precios, cupones y vencimientos.
TIR modificada (TIRM)
Para solucionar algunos inconvenientes de la TIR tradicional, como la reinversión de flujos a la misma tasa, se utiliza la Tasa Interna de Rentabilidad Modificada (TIRM), que permite incorporar una tasa de reinversión distinta y proporciona un resultado más realista en ciertos casos.
La Tasa Interna de Rentabilidad (TIR) es una de las herramientas más potentes en análisis de inversiones, especialmente útil para tomar decisiones bajo criterios de rentabilidad porcentual. Sin embargo, debe usarse con precaución y junto a otros indicadores, especialmente en contextos complejos con varios flujos variables.