La amortización es un concepto financiero y contable que hace referencia, en términos generales, al proceso de devolución gradual de una deuda o al reparto del valor de un activo a lo largo de su vida útil. Por tanto, el término se utiliza en dos contextos principales:

  1. En finanzas, como devolución progresiva del capital de un préstamo o una emisión de deuda.
  2. En contabilidad, como imputación del coste de adquisición de un bien duradero a lo largo del tiempo.

Ambos usos comparten la idea de distribuir en el tiempo un coste o un pago, aunque sus implicaciones y tratamientos varían significativamente.


Amortización en el ámbito financiero

1. Amortización de préstamos

En un préstamo, la amortización es el proceso mediante el cual el prestatario va devolviendo el capital prestado junto con los intereses pactados, habitualmente mediante pagos periódicos (mensuales, trimestrales, etc.).

Existen distintos sistemas de amortización, entre los que destacan:

  • Sistema francés: cuotas constantes, en las que la parte de intereses disminuye con el tiempo y la de capital aumenta. Es el más común en hipotecas.
  • Sistema alemán: la parte de capital amortizado es constante y los intereses decrecen, lo que genera cuotas decrecientes.
  • Sistema americano: se pagan solo intereses periódicamente y el capital se amortiza de una sola vez al vencimiento.

2. Amortización de bonos u obligaciones

Cuando una empresa o Estado emite bonos, se compromete a amortizarlos, es decir, a reembolsar el valor nominal a los tenedores en la fecha de vencimiento o en fechas intermedias si la amortización es anticipada o parcial.

  • Puede hacerse mediante amortización única al vencimiento o de forma escalonada (series).
  • Algunos bonos contemplan amortización anticipada opcional, según ciertas condiciones.
  • Las amortizaciones pueden llevarse a cabo a la par, con prima o con descuento, dependiendo de lo estipulado en el folleto de emisión.

Amortización en el ámbito contable

En contabilidad, la amortización se refiere a la pérdida de valor de los activos fijos (inmovilizado material e intangible) debido al uso, paso del tiempo o desgaste. Su objetivo es reflejar en la contabilidad el consumo de valor de dichos bienes.

¿Qué activos se amortizan?

  • Materiales: maquinaria, edificios, vehículos, equipos informáticos, mobiliario.
  • Intangibles: licencias, patentes, software, fondo de comercio (en algunos casos).

¿Cómo se calcula?

La amortización contable se basa en:

  • Valor del bien
  • Vida útil estimada
  • Método de amortización (lineal, decreciente, según unidades producidas…)

Ejemplo:

Una empresa compra un equipo por 10.000 € y estima que su vida útil será de 5 años. Si aplica un sistema lineal:

  • Amortización anual = 10.000 € / 5 = 2.000 €/año

Esta cantidad se registra como gasto cada ejercicio y reduce el valor contable del activo.


Otros usos del término

  • Amortización anticipada: devolución parcial o total de un préstamo antes del vencimiento pactado. Puede implicar una comisión por parte del banco.
  • Amortización de acciones: en sociedades, se refiere a la reducción del capital social mediante la eliminación de acciones, lo que puede hacerse con o sin devolución de aportaciones a los socios.
  • Amortización fiscal: es el tratamiento que la legislación permite para deducir fiscalmente las amortizaciones contables.

Importancia para el inversor y el empresario

Comprender la amortización es fundamental tanto para los particulares como para las empresas, porque:

  • Afecta al coste total de un préstamo y a la planificación financiera.
  • Tiene implicaciones fiscales importantes.
  • Permite una gestión adecuada del valor contable de los activos.
  • Influye en indicadores clave como el cash-flow o la rentabilidad económica (ROA).

La amortización es un concepto clave que abarca tanto la devolución ordenada de deudas como la depreciación contable de los activos. En ambos casos, permite repartir en el tiempo un coste y facilita la planificación financiera y empresarial de manera más precisa.