El dividendo complementario es la parte del beneficio que una empresa reparte entre sus accionistas al cierre del ejercicio económico, como complemento al dividendo a cuenta que pudo haberse distribuido previamente durante el año.
En otras palabras, el dividendo complementario es el que se paga una vez que la sociedad ha cerrado y aprobado sus cuentas anuales, y su importe depende de los resultados finales del ejercicio y de la decisión de la Junta General de Accionistas.
Diferencia con el dividendo a cuenta
- Dividendo a cuenta: se abona de manera anticipada, normalmente a mitad del ejercicio, sobre los beneficios estimados de la empresa.
- Dividendo complementario: se reparte después del cierre del ejercicio y la aprobación de las cuentas, ajustando el reparto a los resultados reales obtenidos.
Muchas compañías utilizan esta combinación: primero pagan un dividendo a cuenta y, tras la aprobación de resultados, completan la retribución al accionista con el dividendo complementario.
Características principales
- Se paga tras el cierre del ejercicio y requiere la aprobación de la Junta General de Accionistas.
- Depende de los beneficios reales obtenidos por la compañía.
- Complementa al dividendo a cuenta, ajustando el reparto total.
- Puede variar cada año según los resultados, la política de dividendos y la situación financiera de la empresa.
- Refleja la política de retribución al accionista y la capacidad de generación de beneficios sostenibles.
Ejemplo práctico
Una empresa reparte un dividendo a cuenta de 0,20 € por acción en noviembre, basándose en sus previsiones de resultados.
Tras cerrar el ejercicio, confirma que sus beneficios han sido superiores a lo previsto y decide repartir un dividendo complementario de 0,30 € por acción en mayo, tras la aprobación en la Junta General.
De este modo, el dividendo total repartido en el año asciende a 0,50 € por acción.
Ventajas para el accionista
- Permite recibir una parte de los beneficios antes del cierre del ejercicio (a cuenta) y después un ajuste final (complementario).
- Muestra transparencia en la política de retribución.
- Refleja la solidez financiera de la empresa, al poder repartir beneficios definitivos tras verificar las cuentas.
Limitaciones y riesgos
- El importe del dividendo complementario no está garantizado; depende de la situación final de la empresa.
- En periodos de crisis o beneficios bajos, puede reducirse o incluso no repartirse.
- Retraso en el cobro respecto al dividendo a cuenta, ya que solo se paga tras la aprobación de resultados.
Importancia en la política de dividendos
El dividendo complementario es una parte esencial de la estrategia de retribución de muchas compañías cotizadas. Sirve para equilibrar la distribución de beneficios, ya que el dividendo a cuenta se basa en previsiones y el complementario en resultados confirmados.
Además, es un indicador de confianza: una empresa que mantiene o incrementa su dividendo complementario transmite estabilidad y solidez a sus accionistas.
En conclusión, el dividendo complementario es la parte de los beneficios que se reparte tras cerrar y aprobar las cuentas anuales, ajustando el pago realizado durante el ejercicio. Su existencia refleja una política equilibrada de retribución al accionista y proporciona información clave sobre la salud financiera y la estrategia de la empresa.