Una orden con volumen oculto es un tipo de orden bursátil en la que el inversor decide no mostrar al mercado la totalidad del volumen que desea negociar. Es decir, una parte (o la totalidad) del número de títulos que se quieren comprar o vender permanece oculta a los demás participantes del mercado, aunque sigue formando parte del libro de órdenes y puede ejecutarse cuando encuentra contrapartida.
Este tipo de orden se utiliza principalmente para evitar movimientos bruscos en el precio, proteger la estrategia del inversor o minimizar el impacto en el mercado de grandes operaciones.
¿Cómo funciona?
Cuando se introduce una orden con volumen oculto:
- Solo se muestra una fracción visible del total, o incluso nada (si es completamente oculta).
- El sistema de negociación la incluye en el libro de órdenes, pero los demás participantes no pueden ver el volumen oculto.
- La orden se va ejecutando a medida que aparecen contrapartidas, sin revelar el tamaño total de la posición.
- A menudo, cuando la parte visible se ejecuta, se repone automáticamente con una nueva fracción del volumen restante (esto se conoce como «Iceberg order» o «orden iceberg»).
¿Para qué se utiliza?
- Reducir el impacto de mercado: al no mostrar una gran orden, se evita que otros participantes reaccionen subiendo o bajando el precio.
- Evitar especulación en contra: si los demás supieran que alguien quiere vender una gran cantidad de acciones, podrían anticiparse y deprimir el precio.
- Estrategias algorítmicas o institucionales: muy usadas por fondos, bancos y traders profesionales.
- Protección de la confidencialidad: no mostrar intenciones de compra o venta agresivas.
Tipos de orden con volumen oculto
Existen varias formas de introducir volumen oculto:
- Orden totalmente oculta: el volumen total permanece invisible en el libro de órdenes.
- Orden iceberg (orden iceberg visible): solo se muestra una pequeña parte, mientras el resto queda oculta.
- Orden con volumen mínimo mostrable: se define una fracción del volumen que debe mostrarse obligatoriamente.
Regulación y requisitos
Los mercados regulados como BME (Bolsas y Mercados Españoles), Euronext o Xetra, así como la normativa europea MiFID II, permiten las órdenes con volumen oculto, pero imponen ciertos requisitos:
- Solo pueden usarse en mercados donde el sistema permita ese tipo de órdenes.
- En algunos casos, se exige que las órdenes ocultas tengan un volumen mínimo.
- La prioridad de ejecución de estas órdenes es inferior a las órdenes totalmente visibles al mismo precio.
Ventajas
- Menor impacto en el precio al evitar revelar el interés real de compra o venta.
- Protección frente a estrategias especulativas de otros participantes.
- Permite dividir grandes operaciones en partes pequeñas sin levantar sospechas.
- Muy útil en mercados con baja liquidez.
Inconvenientes
- Menor prioridad en el libro de órdenes: si hay dos órdenes al mismo precio, se ejecutará antes la visible.
- Mayor riesgo de no ejecución completa si no aparece suficiente contrapartida.
- No apto para todos los inversores: su uso está más extendido entre operadores profesionales.
Ejemplo práctico
Un fondo quiere vender 200.000 acciones de una empresa cotizada, pero teme que si se publica esa orden completa, el precio baje bruscamente. Introduce una orden iceberg con:
- Volumen total: 200.000 acciones
- Volumen visible: 5.000 acciones
El sistema muestra solo 5.000 acciones en el libro de órdenes. A medida que se ejecutan, se reponen con otras 5.000 hasta completar la operación, sin que los demás vean el tamaño real de la orden.
Las órdenes con volumen oculto son una herramienta sofisticada dentro del mundo de la negociación bursátil. Usadas correctamente, permiten ejecutar operaciones de gran tamaño con eficiencia y discreción.