La subasta competitiva es un mecanismo de adjudicación de valores o instrumentos financieros en el que los inversores presentan sus ofertas indicando tanto la cantidad que desean adquirir como el precio o tipo de interés al que están dispuestos a comprar.
La característica clave de este tipo de subasta es que el precio final de adjudicación se determina en función de la oferta y la demanda, de manera que solo las órdenes más competitivas (es decir, las que ofrecen pagar más en emisiones de acciones o aceptar menos interés en emisiones de deuda) resultan adjudicatarias.
Este sistema se utiliza habitualmente en la emisión de deuda pública y en ciertos procesos de colocación de valores en mercados financieros.
Funcionamiento de una subasta competitiva
- Convocatoria: el emisor (por ejemplo, el Tesoro Público) anuncia la subasta, especificando importe, plazos y condiciones generales.
- Presentación de ofertas: los inversores envían sus solicitudes, indicando:
- La cantidad que desean adquirir.
- El precio o rentabilidad exigida.
- Ordenación de ofertas: se ordenan de más a menos competitivas (en deuda pública, menor rentabilidad solicitada).
- Adjudicación: se asignan los títulos comenzando por las ofertas más favorables para el emisor hasta agotar el importe total emitido.
- Determinación del precio: los adjudicatarios pagan el precio ofrecido en su puja.
Ejemplo práctico
El Tesoro convoca una emisión de bonos por 1.000 millones de euros. Tres inversores presentan las siguientes ofertas:
- Inversor A: 400 millones al 2,8 %
- Inversor B: 500 millones al 3,0 %
- Inversor C: 400 millones al 3,2 %
El Tesoro ordena las ofertas de menor a mayor rentabilidad y adjudica primero al Inversor A (400 millones) y después al Inversor B (500 millones). Solo quedan 100 millones disponibles, que se adjudican parcialmente al Inversor C. El precio y rentabilidad final de cada inversor depende de su oferta.
Subasta competitiva vs. subasta no competitiva
- Subasta competitiva: el inversor define precio y cantidad; el riesgo es no obtener títulos si su oferta no es lo bastante atractiva.
- Subasta no competitiva: el inversor solo indica la cantidad y acepta el precio medio resultante de la subasta; se garantiza la adjudicación, pero sin poder influir en la rentabilidad.
Ventajas y desventajas
Ventajas
- Transparencia en el proceso.
- El emisor obtiene financiación al precio más competitivo posible.
- Permite a los grandes inversores influir en el precio.
Desventajas
- Los pequeños inversores pueden quedar excluidos frente a las pujas de mayor volumen.
- Mayor incertidumbre para los participantes, ya que no tienen asegurada la adjudicación.
En definitiva, la subasta competitiva es un método clave en la emisión de deuda pública y en otros procesos de colocación de valores, en el que la competencia entre inversores define el precio y la adjudicación final.